diablo(Infierno, Agencia EPS) En un hecho inédito en la historia de la humanidad, el diablo ha decidido poner en venta las almas compradas a través de los siglos, por encontrarse en un momento histórico en el que la oferta excede, de manera escandalosa, a la demanda. En diálogo exclusivo con la Agencia EPS, un abatido Satanás (así le gusta que lo llamen) esgrimió sus argumentos para la toma de semejante decisión, sin esconder absolutamente nada. "Es increíble. Nunca pensé que ya llegaría a este punto. Estoy absolutamente sobrestockeado y me siguen lloviendo ofertas de gente que me quiere vender su alma. No sé qué hacer..." Esas fueron las primeras palabras de Lucifer refiriéndose al tema que lo aqueja de manera excluyente.

"Hoy por hoy, apenas le estoy dedicando tiempo a lo que realmente me gusta: algún tsunami por ahí, un golpecito de estado maquillado de democracia por allá, pero muy poca cosa. Todas mis energías están destinadas a equilibrar las cuentas, pero no estoy pudiendo...", continuó explicando. Ante la pregunta de cuándo había empezado el problema, respondió: "Que se agravó no hace mucho, pero en las últimas décadas ya venía dando señales que no supe ver. Y al entrar al siglo XXI, el balance se fue a mí (risas). Para atender la catarata de ofertas recibidas tuve que contratar abogados y contadores que se hicieron pasar por mí para hacer las compras y establecer las condiciones, lo que aumentó todavía más los costos. Ahí me di cuenta de que la mano venía mal, pero por una cuestión de principios, no aflojé. ¿Qué iban a decir todos si yo empezaba a rechazar a la gente que me quería vender el alma? Tenía que cuidar mi imagen...", concluyó.

La crisis europea fue la gota que desbordó el vaso del jefe supremo del infierno. "A principios de 2012, la lista de políticos, empresarios y mandos medios estaba desbordada por varios millones. Ahí me dejé de principios, mandé todo a mí mismo (más risas) y cambié totalmente la estrategia. Empecé abriendo HTH (Highway To Hell, una empresa de almacenamiento y gestión de almas) y puse a la venta acciones en la Bolsa, tratando de encontrar inversores... Me fue peor que a Facebook. Era obvio que el sistema iba a reaccionar de esa manera y yo, que debería saberlo mejor que nadie (nos guiña un ojo), no lo preví". Casa de subastas, sitios web de compra y venta e inclusive la posibilidad de devolverle el alma a sus vendedores originales a un precio sensiblemente menor, fueron algunas de las acciones llevadas adelante por Mefistófeles para enfrentar la crisis, todas sin éxito: "Los políticos no quieren almas para sus actos públicos, para eso tienen la televisión, dicen. Los músicos no quieren almas para sus recitales, la gente anda feliz de la vida siendo desalmada. Es increíble...".

¿Quedan opciones? Su respuesta fue categórica: "Sí, dos, pero de sólo pensar en ellas, me da escalofríos... La primera es llamar al Papa, Dios no lo permita (nuevo guiño), y hacerle alguna oferta tentadora (otro guiño más, ya sospechamos que se trata de un tic nervioso). Y lo último que me queda es confiar que la profecía maya sea cierta, a partir del 2013 se abra un tiempo más espiritual y que por esa razón mejoren los precios..."

Tras rechazar amablemente un par de almas de regalo y agradecer por su tiempo en estas circunstancias, nos retiramos con la certeza de haber visto algo increíble: el mayor éxito del diablo parece que ha sido su mayor fracaso.

Seguiremos informando, si Dios quiere...



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