(La Paz, Agencia EPS) Una sucesión de malos entendidos hizo que el mundo entero diera por cierta una noticia que no fue tal. En efecto, el gobierno boliviano no tiene en agenda la intención de expulsar a la Coca Cola de su país, sino prohibir la aplicación de enemas a base de agua hervida con hojas de coca, tan utilizados en esa región y conocidos popularmente como coca en la cola, por haberse detectado posibles efectos nocivos para la salud tras su aplicación de forma reiterada.
En un breve comunicado, el Ministerio de Salud y Deportes de Bolivia, expresó la determinación del gobierno de prohibir la aplicación de aquellos enemas que incluyan hojas de coca en su preparación, ya que un estudio (aún en etapa preliminar) realizado por su cartera, señaló que ese tipo de clisma puede generar problemas a largo plazo en el tracto intestinal. Aclararon también que, a pesar de no contar con los resultados definitivos del estudio, prefieron tomaron esta resolución de forma preventiva hasta nuevo aviso.
Finalmente se refirieron a la confusión de esta medida con la expulsión de la multinacional del refresco de su país. "Los medios cometieron un error que, para nosotros, es un hecho habitual", dice el comunicado, "Estamos acostumbrados a que llamen 'cocacoleros' a quienes cultivan la hoja de coca, esta no es más que una perla de ese collar. En todo caso la culpa es de la empresa y no nuestra; si (como dicen) ya no usan coca en la fórmula podrían cambiarle el nombre. Ya ven que la Pepsi no tiene ese problema".
Por su parte, fuentes cercanas a Coca Cola Bolivia, hicieron saber a la Agencia EPS que se piensa aprovechar la oportunidad para aclarar definitivamente la situación y mostrar las buenas relaciones que existen con el gobierno, lanzando al mercado interno la Coca Evo (ver imagen a la derecha), un refresco con sabor a mocochinche (durazno o melocotón).
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