(La Pedrera, Uruguay, Agencia EPS) El episodio que involucró al cantante Gustavo Cordera con estudiantes de periodismo de la Escuela Tea se volvió viral. En efecto, en el marco de una materia donde asisten celebridades para ser entrevistadas por los alumnos, por razones que se tratan de establecer concurrió (en lugar de la celebridad de turno) el ex líder de la Bersuit Vergarabat. Durante el evento, Cordera tuvo declaraciones incalificables donde afirmó que “hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo” o “es una aberración de la ley que si una pendeja de 16 años con la concha caliente quiera coger con vos, vos no te las puedas coger”. Como esta agencia de noticias se caracteriza por brindar las dos campanas de la información, y a nadie sorprendería que estas frases hubieran sido sacadas de contexto, accedimos a una entrevista exclusiva con el cantautor para conocer su opinión sobre este escabroso tema.
EPS – Hola Gustavo, ¿cómo estás?
GC – ¡Chupame la garcha!
EPS – Epa, ¿qué pasó hermano?
GC – ¿Ves? Vos sos un periodista inteligente. Yo te monto en un segundo un psicodrama breve, intenso, provocador, antisistémico y vos te parás como un buen periodista y repreguntás. No debés haber estudiado en esa academia de mierda...
EPS – ¿Qué pasó en la Escuela TEA?
GC – No pasó nada. Yo fui a una charla el lunes, donde se simula una conferencia de prensa a una celebridad. Como Agustín Casanova (cantante de Márama) canceló a último momento, me llamaron a mí. Yo les dejé bien claro que, con mis profundos conocimientos del arte escénico, iba a ponerme en el papel de una figura acorde a las preguntas que hicieran, los iba a provocar porque soy antisistémico, anarcoprimitivista y antipirético. Ese acuerdo... esperá (la entrevista entra en una pausa porque suena el microondas, vuelve con un brownie y una taza de café). Te decía, ese acuerdo quedó firmado en un documento que tengo guardado junto a mi diploma de licenciado en genética humana y lo voy a presentar cuando corresponda.
EPS – Entonces todo fue una puesta en escena...
GC – ¡Pero por supuesto! ¿Cómo se te ocurre pensar que yo pueda estar de acuerdo con semejantes disparates? No te olvides de que yo ayudé a voltear a la dictadura, no falté a ninguna marcha en defensa de los derechos de las mujeres y de los niños, colaboro con instituciones de pibes carenciados y les llevo comida a... ¿de dónde salió todo este humo?
EPS – Ni idea, pero ya se está yendo. Bueno, para finalizar y que no queden dudas: vos no pensás que haya que violar a algunas mujeres porque son histéricas y está mal tener sexo con menores, más allá de cómo se encuentre su vagina. ¿Estás de acuerdo?
GC – No le cambio ni una coma a eso que dijiste. Todo fue una especie de psicodrama donde yo me puse en el lugar del interpelado, me hablaron de pedofilia y actué como un pedófilo, nada más.
EPS – Bárbaro, pero yo soy varoncito, ni mencioné el homosexualismo y me estás mirando el culo...
GC - ¿Ves? ¿Ves que sos terrible periodista? Vos no te comés ninguna, estás para un premio Pulitzer. Tenés una visión estratosférica de los reportajes, no te amilana un entrevistado inquisidor, locuaz, verborrágico, pluscuamperfecto, anti políticamente correcto y antisistémico como yo. Sin ir más lejos, recuerdo una marcha itinerante y transólida en la lucha por la defensa de los derechos de las mujeres menores de edad. Yo iba al frente con una pancarta que decía “Si te molesta, chupame... (la entrevista termina abruptamente por la aparición de una cortina de humo tan espesa que impedía escuchar al entrevistado).
Seguiremos informando.
